En junio de 2004 falleció Alfredo Torero en Valencia (España), después de una penosa enfermedad, a la edad de 73 años. Nacido el 10 de septiembre de 1930 en la costeña ciudad peruana de Huacho, Alfredo Torero Fernández de Córdova dedicó su vida académica al estudio de las lenguas andinas y se le puede considerar como el fundador de la lingüística andina moderna. Obtuvo el doctorado en 1965, bajo la dirección del lingüista André Martinet, de la Sorbona de París, con una tesis sobre Le puquina, la troisième langue générale du Pérou. Al volver al Perú trabajó en la Universidad Nacional Agraria La Molina por cuatro años para después integrarse al personal docente de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Lima. Fue Director del Instituto de Investigaciones Lingüísticas de esa universidad desde 1982 hasta 1992. Desde el principio se dedicó a los estudios sobre la dialectología quechua. Su clasificación de esta lengua (o familia lingüística) sigue siendo vigente aún en nuestros días (1964, 1970, 1983, 1993c). Pero su interés en las lenguas andinas no se limitaba sólo a los aspectos lingüísticos formales, sino que intentaba interrelacionarlos con factores histórico-culturales (1974, 1990a, 1993a). Aparte de sus trabajos sobre la lengua quechua llevó a cabo estudios minuciosos y detallados sobre otras lenguas andinas, ya desaparecidas desde hace siglos, como son las lenguas norteñas (1986, 1989, 1993b, 1997b) y las de los Andes centrales sureños (1987, 1992). Analizó la interacción quechua-aru (1998), se dedicó al estudio del rol de las lenguas en el comercio lejano (1984), examinó la &8216;lengua particular&8217; de los incas (1994a) y el contacto lingüístico entre lenguas andinas y el castellano (1994b, 1995b, 1999a, 1999b). La síntesis de esta obra pionera en historia y estructura lingüística, la presentó en su libro Idiomas de los Andes (2002), en el cual reunió muchos de sus estudios previos, poniéndolos en un contexto interpretativo de tipología lingüística andina: &8220;La obra que ofrecemos al lector se propone dar un aporte a la recuperación de la historia lingüística y cultural propia del hombre de los Andes, mediante la exposición de las características de los idiomas andinos hoy desaparecidos, su comparación entre sí y con las lenguas nativas sobrevivientes, y la correlación de los datos de la lengua con procesos sociales específicos.&8221; (Idiomas de los Andes 2002: 13)